Proyecto financiado por el Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras, Convocatoria Teatros Regionales y Municipales 2024 del Ministerio de las Culturas, Las Artes y el Patrimonio.
Luego de su puesta en escena en 1984, el emblemático Teatro Ictus reestrenó en 2023, a 50 años del golpe militar en Chile, una nueva versión de “Primavera con una esquina rota”, basada en la novela homónima de Mario Benedetti. A más de 1 año de ese acontecimiento, la obra se ha seguido presentando con éxito en diversos escenarios nacionales, y el pasado 27 de septiembre llegó al Teatro Municipal de Vicuña.
Proyecto financiado por el Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras, Convocatoria Teatros Regionales y Municipales 2024 del Ministerio de las Culturas, Las Artes y el Patrimonio.
Bajo la dirección de Jesús Urqueta y la adaptación de Emilia Noguera, la obra cuenta la historia de una familia, entre Uruguay y México, víctima del exilio y la dictadura. El montaje teatral cuenta con las actuaciones de Daniel Muñoz, Paula Sharim, Roberto Poblete, Marcela Medel, Nicolás Zárate y Camila Oliva.
Daniel Muñoz interpreta a Santiago, un hombre apresado por la dictadura uruguaya que anhela el reencuentro con su familia y amigos, quienes sufren las consecuencias del exilio en México. “La gente estuvo atenta a la historia que estábamos contando, que es importante por este ejercicio de memoria que queremos defender con esta obra”. Muñoz enfatiza en el sentir que provoca este reestreno en el público a más de un año de presentaciones, “la recepción es impresionante, la gente que vivió en época de dictadura, la gente que no la vivió, todos, de una manera como de catarsis, a través de ver esta obra se sienten liberados, y otros ver la obra para conocer lo que fue, se produce un vínculo”.
En tanto, Roberto Poblete interpreta a Rafael, padre de Santiago (Daniel Muñoz). En el montaje de 1984, Rafael era interpretado por Roberto Parada, padre de José Parada quien fue secuestrado y asesinado junto a Manuel Guerrero y Santiago Nattino; el denominado Caso Degollados en 1985. “Parece que la gente, parece que todos queremos tener un viaje a un lugar donde podemos recordar y hablar de las cosas que realmente nos pasaron. Yo formé parte de ese primer montaje y las cosas que nos pasaron durante ese primer montaje el año 1984, siglo pasado, no fueron del todo buenas, lo lindo fue que hicimos un trabajo serio, profundo (…) pero el momento político que vivía nuestro país, la forma en que eran tratados los artistas, y lo que le pasó a don Roberto (Parada), es lo que nos hace recordar con mucho dolor, por momentos, esta obra”.
Todo parte con una intensa discusión entre tres personajes, el esposo, la esposa y un amigo, sobre política, poder, sociedad, familia e ideales.
Originalmente, en 1984, fue Nissim Sharim y Héctor Noguera quienes llevaron a la dupla de amigos a escena. En este remontaje Santiago y Rolando son interpretados por Daniel Muñoz y Nicolás Zárate, quien relata lo positivo de la obra tras su presentación en Vicuña, “llevamos más de 100 funciones y para nosotros fue un placer estar hoy en el teatro de Vicuña, la gente fue muy cariñosa, muy respetuosa. Esta es una obra que tiene una relación con el público porque es muy íntima, se genera una especie de catarsis emocional”.
Paula Sharim, Graciela esposa de Santiago, remarca el valor de presentar esta pieza teatral en plena democracia, “traer esta obra, como ha sido llevarla a tantas partes en Chile y también fuera de Chile es importante, porque creo que cuando se montó esta obra, tenía un sentido político, social, cultural, donde se necesitó mucha valentía, y lo que hacemos nosotros no es necesario que seamos tan valientes, pero sí recordar lo que el año 84 hizo el Ictus, se atrevió, estuvo y este es un homenaje para todos ellos, que fueron capaces de sacar la voz y de hacer una obra tan linda como esta”.
Fernando Rivera, conocido farmacéutico de Vicuña, asistió muy emocionado a ver la obra por segunda vez con nuevo elenco, “la vi con el elenco original del Teatro Ictus cuando estaba Nissim Sharin, Hector Noguera, Delfina Guzman, Roberto Parada, estaba estudiando en Santiago y cuando aparece el Teatro Ictus en plena dictadura militar y la fui a ver con mi mamá, que en paz descanse, y terminamos llorando, por lo que significaba en ese momento, en ese contexto, hoy en día verla acá en Vicuña, han pasado 40 años y tal como decía el director, se trata de recordar la memoria para que esto no pase nunca más en ningún lugar del mundo”.
El director Jesus Urqueta – con éxitos recientes como “Arpeggione” y “El mar en la muralla” – nos muestra un escenario vacío. Seis sillas que cambian de lugar y una precisa iluminación ambientan los sitios representados: una casa, una plaza, una cabina telefónica, una cárcel. A medida que avanza el relato, vamos entrando en la emoción de lo que vive un padre preso por la dictadura, una niña con un padre ausente, una esposa desenamorada por el tiempo, un amigo culpable por sentir amor hacia la esposa de su amigo y un abuelo que no puede más con las circunstancias.
Jesús Urqueta se manifestó muy emocionado de estar en su región, dado que es ovallino, “es muy recíproca la historia que contamos con la reacción del público, que la observó y dialogó con mucho respeto, muy emocionado y acongojado. Creo que se cumple uno de los objetivos de la obra, que es generar a través del teatro un ejercicio de memoria, donde podamos como ciudadanas y ciudadanos, que pensamos distinto, reflexionar sobre un tema importante”.
Desde el público, Patricia Salinas disfrutó, reflexionó y agradeció esta presentación, “un excelente montaje para todos quienes vivimos en carne propia lo que fue el golpe de Estado, si bien esta es una obra de Mario Benedetti que habla también del tema de derechos humanos en Uruguay, nos llega totalmente. Estoy muy impactada de ver a estos grandes actores en escena”.
El alcalde de Vicuña Rafael Vera valoró este despliegue artístico y lo que significa para la sociedad recordar y reflexionar sobre estos hechos, “después de 40 años desde su primer estreno, esta obra de teatro nos sigue conectando con la realidad, nos sigue haciendo reflexionar, nos sigue haciendo pensar cómo este país pasó momentos tan tristes, de cómo este país no fue capaz de darse cuenta de que cualquier dictadura, por ambiciosos que sean sus deseos, no es buena”. El jefe edilicio agregó, “darle las gracias a estos grandes actores que han marcado la escena nacional, actores que son parte de la historia de nuestro país, creo que para todos los que asistimos a esta obra fue un momento especial, muchos sentimientos involucrados”.
Teatro Ictus, nacido en 1955, repuso este texto como un acto de homenaje a los artistas que resistieron el más oscuro periodo de nuestra historia, así como también un recordatorio a que la memoria sigue y seguirá presente en aquellos que padecieron esta época.
La Corporación Cultural Municipal de Vicuña forma parte del Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que busca fortalecer y dar continuidad a instituciones y organizaciones culturales de derecho privado y sin fines de lucro. Este programa además es parte del Sistema de Financiamiento a Organizaciones e Infraestructura Cultural del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio que integra, articula y coordina de forma transversal los planes, programas y fondos orientados al fomento y apoyo de las organizaciones, de la infraestructura cultural, y de la mediación artística. Todo esto con una vocación descentralizada, mecanismos participativos, y la promoción de la creación de redes y asociaciones.